“La lucha en la pista no la gana
siempre el más fuerte ni el más rápido,
tarde o temprano, el que gana
es el jugador que piensa, el que es inteligente”
Hoy quiero hablar del rol del base.
Hace varios años la tendencia a la hora de escoger los jugadores en la posición de base se centra en buscar la máxima altura del jugador y en que sea anotador, a partir de ese hándicap, todo lo demás parece muchas veces secundario.
Un buen físico es importante para el baloncesto actual (a mi personalmente no me gusta esta tendencia, no creo en él). El físico prevalece hoy por encima de la técnica y la táctica. Da igual el nivel táctico que tenga, da igual el nivel técnico que posea, si es un monstruo físico y no se la bota al pie…FICHADO!
¿Es mas importante la altura y la anotación que saber leer un partido de baloncesto? Mas importante que ser la prolongación del entrenador en la pista? Mas importante que saber llevar el ritmo de partido? Mas importante que hacer jugar al equipo? Mas importante que ser el referente dentro de la pista? Mas importante que saber calmar o animar a tus compañeros? Y todavía mas importante; es mejor que saber defender?
Los jugadores “bajos” (para que me entiendan) no tienen cabida en nuestro baloncesto, no la tienen porque no les dejan ninguna oportunidad, por lo que es casi imposible llegar. No todos son válidos, no digo eso; como tampoco quiero decir que un jugador con buen físico no pueda ser un jugador inteligente. (Creo que ya me entienden).
Ya no existen para que me entiendan jugadores “Joan Creus”, algunos diran: es imposible que haya otro Creus, puede ser cierto, seguramente tengas razón, pero si no les damos oportunidades seguro que no llegaran.
En algunas pistas, y en algunos partidos podemos ver todavía algunos jugadores (bases), que aún son la esencia de este deporte; saben mandar al equipo, saben leer los partidos, cuando tienen que tirar, tiran. Cuando tienen que correr, corren. Cuando tienen que dar ese último pase lo dan. Pero nunca llegaran, no son tan “guapos”, una lastima.
En mi opinión siempre tienes que tener un gran jugador de ajedrez, si lo tienes, estarás dos pasos por delante que otros equipos, y si además es un base, mucho mejor. Porque el baloncesto, aunque a veces ya no lo parece, es un juego para listos.
Pruébalo; antes de fichar o antes de empezar una temporada, saca el tablero de ajedrez, te ahorraras tener que cortar jugadores a mediados de temporada, o de no saber que hacer para que no pare de calentar el banquillo. Sales ganando.
Para alcanzar el éxito tienes que estar seguro del grupo, y para estarlo necesitas un referente en la pista para poder alcanzar la meta. De que te sirve un Porche último modelo si no sabes interpretar ni el Gps para llegar a tu destino.
Si puedo elegir entre un base alto y anotador o un base menos alto e inteligente, elegiré al último. Ganará el equipo, ganaré yo.
Y con clave de humor, me uno a una cadena de prductos: YO NO SOY TONTO
24 de desembre del 2008
19 de desembre del 2008
Te amo
El baloncesto es la cosa más importante de las cosas poco importantes." Roberto Santos
A mí, hay veces que se me olvida.
Hoy puedo decir que poseo un talismán, un sitio donde puedo fluir, un lugar inviolable en el que me siento “yo”, en el que no existen los problemas diarios que puedan afectarme, ningún input que pueda haber asimilado mi cerebro existe en la pista rectangular.
No es meramente una pista de baloncesto, no es simplemente 28X15m. En este lugar el mundo queda reducido, pierdo la noción del tiempo. No necesito más; ese espacio es mi vida.
En 28x15 existen todos los valores y sentimientos que nos podemos encontrar fuera. El baloncesto es una manera de ver la vida, de enfocarla.
Con el tiempo las amargas derrotas, y los fracasos los rememoraremos, con una leve sonrisa, solo nos acordaremos de los buenos recuerdos, los partidos ganados, las amistades, los buenos sentimientos; y, en agosto, siempre en agosto, empezaremos de nuevo un nuevo proyecto, nuevas ilusiones, nuevos sueños, nuevas ideas, nuevos retos.
A soñar, a delirar, a imaginar, a fantasear, a idealizar. Y todo ello, siempre, en nuestros veintiocho por quince. Tan pequeña que parece eh? (pido perdón a los susceptibles).
Nadie nos puede impedir sentir el baloncesto, nadie nos puede decir que no hace falta tomarlo como profesionales, ya que no cobramos como ellos; nadie que te diga que entrenar no es un trabajo; nadie…
Te amo
A mí, hay veces que se me olvida.
Hoy puedo decir que poseo un talismán, un sitio donde puedo fluir, un lugar inviolable en el que me siento “yo”, en el que no existen los problemas diarios que puedan afectarme, ningún input que pueda haber asimilado mi cerebro existe en la pista rectangular.
No es meramente una pista de baloncesto, no es simplemente 28X15m. En este lugar el mundo queda reducido, pierdo la noción del tiempo. No necesito más; ese espacio es mi vida.
En 28x15 existen todos los valores y sentimientos que nos podemos encontrar fuera. El baloncesto es una manera de ver la vida, de enfocarla.
Con el tiempo las amargas derrotas, y los fracasos los rememoraremos, con una leve sonrisa, solo nos acordaremos de los buenos recuerdos, los partidos ganados, las amistades, los buenos sentimientos; y, en agosto, siempre en agosto, empezaremos de nuevo un nuevo proyecto, nuevas ilusiones, nuevos sueños, nuevas ideas, nuevos retos.
A soñar, a delirar, a imaginar, a fantasear, a idealizar. Y todo ello, siempre, en nuestros veintiocho por quince. Tan pequeña que parece eh? (pido perdón a los susceptibles).
Nadie nos puede impedir sentir el baloncesto, nadie nos puede decir que no hace falta tomarlo como profesionales, ya que no cobramos como ellos; nadie que te diga que entrenar no es un trabajo; nadie…
Te amo
18 de desembre del 2008
El árbitro y los sabios
Para empezar este blog, se tiene que hablar de los hombres indispensables que hacen que podamos disputar los partidos de baloncesto; si lo se, no es un tema agradable.
Partiendo de la base que es común en el ser humano pensar que la culpa es del otro; voy a intentar hacer ver mi punto de vista.
La historia se repite, rayando a veces lo irrisorio, en el caso particular del baloncesto en los que se necesita un arbitraje y, por lo tanto, alguien que asuma la responsabilidad para cuidar de la mejor manera posible las reglas del juego, de la forma más cercana a la utópica "objetividad".
Los árbitros suelen ser los culpables de nuestras derrotas o mejor dicho de las de nuestro equipo, y de las victorias del equipo contrario. Tanto es así, que es considerado como normal que a los árbitros se les recalquen (con poca educación, en el mejor de los casos) sus supuestos fallos o errores.
Suponiendo incluso que los árbitros siempre se equivocaran cuando se cree que así ocurrió, ¿alguien vería normal que un árbitro le comentara a un entrenador de uno de los equipos que están jugando, lo patético de sus tácticas, de sus técnicas o sus estrategias? ¿O quizás lo pésimamente que juegan sus jugadores debido a su incompetencia como entrenador de baloncesto en cuestión? No, ¿verdad?
¿Porqué no podría un árbitro, con esta misma lógica, dirigirse a un entrenador y criticarle la labor de su trabajo, cuando el mismo entrenador hace lo propio con la profesionalidad del árbitro?
¿Porqué no podría un árbitro, una vez más con esta misma lógica, dirigirse a un jugador y criticarle su desempeño deportivo como tal, cuando los miembros de su equipo hacen lo propio con la reputación profesional y la labor (también deportiva, sin duda) del árbitro?
Es más ¿alguien vería normal el que una persona ignorante en un tema determinado, le recalque sus "supuestos" errores a otra persona que se ha instruido en dicho tema? ¿Podría, con alguna legitimidad, un Profesor criticar a un Abogado en lo relativo a su profesión, y viceversa? ¿Qué sabe un Profesor de Abogacía o un Abogado de Profesor?
Se que es muy difícil en ocasiones poder sobreponerte a estas situaciones, ¿quien no ha protestado o criticado alguna decisión arbitral? ¿a que entrenador nunca le han pitado ninguna técnica o infracción? Por supuesto que puede haber alguno, pero el % es mínimo.
Por eso creo que tenemos que intentar siempre rebajar la importáncia del rol del árbitro en nuestros resultados finales, y inculcar a los jugadores el respeto para la figura del colegiado, porque no nos engañemos, un arbitro no te hace perder partidos.
Para finalizar y en relación a lo anterior; ¿ entieden ahora porque hay tantos padres que nos critican a los entrenadores? ¿ entieden ahora porque hay tantos padres que saben más que nosotros?.... por la misma razón que nosotros sabemos más que los arbitros y lo vemos todo perfectamente, mientras que el árbitro es un "cegato".
Claro será porque no predicamos con el ejemplo.
Por cierto; nunca me he presentado en el lugar de trabajo de ningún padre y le he dicho como tiene que hacer su trabajo, vosotros si?
Partiendo de la base que es común en el ser humano pensar que la culpa es del otro; voy a intentar hacer ver mi punto de vista.
La historia se repite, rayando a veces lo irrisorio, en el caso particular del baloncesto en los que se necesita un arbitraje y, por lo tanto, alguien que asuma la responsabilidad para cuidar de la mejor manera posible las reglas del juego, de la forma más cercana a la utópica "objetividad".
Los árbitros suelen ser los culpables de nuestras derrotas o mejor dicho de las de nuestro equipo, y de las victorias del equipo contrario. Tanto es así, que es considerado como normal que a los árbitros se les recalquen (con poca educación, en el mejor de los casos) sus supuestos fallos o errores.
Suponiendo incluso que los árbitros siempre se equivocaran cuando se cree que así ocurrió, ¿alguien vería normal que un árbitro le comentara a un entrenador de uno de los equipos que están jugando, lo patético de sus tácticas, de sus técnicas o sus estrategias? ¿O quizás lo pésimamente que juegan sus jugadores debido a su incompetencia como entrenador de baloncesto en cuestión? No, ¿verdad?
¿Porqué no podría un árbitro, con esta misma lógica, dirigirse a un entrenador y criticarle la labor de su trabajo, cuando el mismo entrenador hace lo propio con la profesionalidad del árbitro?
¿Porqué no podría un árbitro, una vez más con esta misma lógica, dirigirse a un jugador y criticarle su desempeño deportivo como tal, cuando los miembros de su equipo hacen lo propio con la reputación profesional y la labor (también deportiva, sin duda) del árbitro?
Es más ¿alguien vería normal el que una persona ignorante en un tema determinado, le recalque sus "supuestos" errores a otra persona que se ha instruido en dicho tema? ¿Podría, con alguna legitimidad, un Profesor criticar a un Abogado en lo relativo a su profesión, y viceversa? ¿Qué sabe un Profesor de Abogacía o un Abogado de Profesor?
Se que es muy difícil en ocasiones poder sobreponerte a estas situaciones, ¿quien no ha protestado o criticado alguna decisión arbitral? ¿a que entrenador nunca le han pitado ninguna técnica o infracción? Por supuesto que puede haber alguno, pero el % es mínimo.
Por eso creo que tenemos que intentar siempre rebajar la importáncia del rol del árbitro en nuestros resultados finales, y inculcar a los jugadores el respeto para la figura del colegiado, porque no nos engañemos, un arbitro no te hace perder partidos.
Para finalizar y en relación a lo anterior; ¿ entieden ahora porque hay tantos padres que nos critican a los entrenadores? ¿ entieden ahora porque hay tantos padres que saben más que nosotros?.... por la misma razón que nosotros sabemos más que los arbitros y lo vemos todo perfectamente, mientras que el árbitro es un "cegato".
Claro será porque no predicamos con el ejemplo.
Por cierto; nunca me he presentado en el lugar de trabajo de ningún padre y le he dicho como tiene que hacer su trabajo, vosotros si?
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